Miro por la ventana y sólo veo un color: el blanco. Está todo nevado y hace un frío de mil pares de
Y ya tocaba, porque hasta hace dos días, hacía un calor que para la época del año en la que estamos era más raro que un perro verde.
¿Y qué ha pasado? Pues lo que suele pasar cuando nieva copiosamente: carreteras cortadas, coches patinando por las calles, y sobretodo, aceras resbaladizas... Que casi me mato mientras volvía de la oficina esta tarde...
Así que, a los que mañana no tenéis que ir a clase, podréis dormir. Y yo a trabajar, claro que sí. (¡y sin cobrar, qué estoy de prácticas!)
Ale, buenas y nevadas noches.
PD: Estoy pensándolo mejor, y sí mañana hay mucho hielo, me dejaré los esquís y me llevaré unos pantines de hockey.
1 comentarios:
Lo peor es que con la helada de esta próxima noche. La nieve se convertirá en hielo duro que permanecerá en las calles varios días. Tengo la sensación de que ha habido muy poca (o nula) previsión ante esta avisada situación .
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